Regen (1929)
Joris Ivens
Holanda
12m.
Sin ningún trasfondo aparente aparte de la documentación en si, Joris Ivens nos regala una película que logra un fluido y suave viaje a lo largo de un día de lluvia. Sin más que eso, se logra retratar el paso cotidiano de un ciudad afectada por este fenómeno. Por las calles del mercado y los cruces del tranvía podemos ver a las personas que huyen de la lluvia y a las personas que se cubren de ella.
El elemento que realmente eleva este documental a una pieza interesante es la búsqueda por parte del director de buscar mostrarnos la vida en las calles con una mirada distinta. Constantemente entonces nos encontramos descifrando imágenes que no son más que meros reflejos sobre charcos de agua desencadenando así, una serie de propuestas en cuanto a la flexibilidad de la cámara. Es con eso con lo que Ivens propone una mirada distinta a la realidad, invitando a un grupo de espectadores a ver juntos lo que por mera física sólo podría ver uno en la vida real. Por fortuna, esta película es de poca duración lo que permite que podamos ver la propuesta completa del director sin comenzar a aburrirnos por la falta de eventos o la constante repetición de los reflejos. Esto mismo nos hace pensar en Regen como un ejercicio del director que se vale de los efectos de la lluvia y del lenguaje documental para proponer una mirada distinta y atractiva hacia la realidad.
Sin embargo por los 12 minutos que dura este documental, se puede disfrutar de una agradable y fresca propuesta en cuanto a miradas y el montaje cinematográfico.
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